Durante un megaoperativo realizado por el Gabinete de Seguridad, se han trasladado un total de 2,000 terroristas de distintas pandillas hacia el Centro de Confinamiento del Terrorismo (CECOT), la noche del pasado jueves, bajo estrictos perímetros de seguridad, incluso desde el aire a través de helicópteros de la corporación policial y militar.
Este ha sido el primer traslado de privados de libertad hacia la megacárcel, esta será su “nueva casa”, donde pasarán su vida pagando por la sangre derramada injustamente, este es el momento en el que se hace justicia para aquellas familias que perdieron a un ser querido, un hermano, un amigo, a manos de criminales que mataron con lujo de barbarie.
El CECOT cuenta con ocho pabellones ubicados dentro de un perímetro rodeado por un muro de concreto de 11 metros de altura y 2,1 kilómetros de largo. Todo protegido por alambradas electrificadas que hacen imposible poder escapar.
Ahora les toca a ellos, pasar por un poco de lo que provocaron, ahora ellos no verán la luz del sol, son ellos los que no volverán a ver a sus familiares, pues no habrá visitas ni comunicación con el mundo exterior.
